¿Se puede aprender una segunda lengua de adultos?

Saber otros idiomas es sumamente útil en nuestras vidas no sólo desde un punto de vista laboral sino porque también es muy necesario para investigar, conocer culturas y viajar.

La mayoría de las personas cree que, si no se han dado la oportunidad de aprender una segunda lengua de niños, les será imposible hacerlo de grande. El factor más común es la falta de tiempo, pero muchas veces es el pensar que ya no será intuitivo y sencillo como en la niñez.

Sin embargo, el proceso de aprendizaje es diferente, ya que el adulto cuenta con ventajas derivadas del hecho de que ya ha aprendido a aprender: puede razonar consignas, seguir instrucciones y procesar información de una manera distinta. Su aparato conceptual, sus técnicas y capacidad de concentración son superiores a los del niño.

El mayor desafío para un estudiante de idiomas adulto es evitar la comparación de lo que está aprendiendo con aquello que ya sabe, del vocabulario y estructuras utilizados en una lengua y la otra. Esto hace totalmente necesario que el tipo de pedagogía utilizada en la clase se adapte a ellos y que sea el profesor quien deba ayudarlos a aprender esa lengua desde cero, como un niño aprende su lengua madre. Las técnicas que se utilicen deben ser efectivas y didácticas, ya que lo que debemos lograr es que el alumno cree su propio diccionario utilizando como referencia ejemplos e imágenes, pero nunca traducciones.

En Move On, nuestro objetivo es hacer que el adulto encuentre facilidad en el aprendizaje de la segunda lengua, enseñándoles de una manera progresiva para lograr que la comunicación sea efectiva y natural. 

Como docentes, nuestro desafío es tan grande como el de los alumnos. 

Es por eso que un trabajo en conjunto basado en la confianza y el profesionalismo es la clave del éxito.